JUGAR SOLITO

Hemos crecido, pues sí, pero aún así nos apetece jugar, y en ocasiones solitos. ¿Quién no ha tenido las más guarras (o las más nobles, porqué no... ) intenciones para practicar en solitario? 

Jugar a solas, explorar nuestro cuerpo, deseos y fantasías, puede ser un aliciente tras una jornada cargada de pesares, o el culminar otra repleta de emociones.

¿Habéis probado la lefa propia directa de su fuente?..

¿O metido hasta lo indecible por pura autosatisfacción?

¡Decidme quién no ha intentado la autofelación de mil maneras para lograrlo!

Y hablando de meter... Hurgar en el frigo hasta encontrar aquello que quepa... 

¡Hurra por quien logró su cometido!

Y para fetiches... Más de uno no ha tocado un balón en su vida... pero el morbo del deporte y sus actores, es innegable... 

Cualquier lugar es bueno para un pajote.

Tiro al blanco... Otra divertida opción.

Acabar cubierto por la propia lefa...

O recibirla certeramente en nuestra boca.

Muchas son las opciones para quien juega solo...

Y algunas más recurrentes que otras...

Lo importante es acabar feliz

estés donde estés...

acaba siempre de la mejor manera.

Y si no quieres ya jugar solito...

Invita a esos amigos que sabes siempre estarán dispuestos a hacerte compañía.

Aprecia a ese buen amigo,

siempre dispuesto a dar una mano...

O cuanto haga falta...

Y a aquellos otros, que saben compartir...

lo bueno que les da la vida...

¡Vive, Siente, Disfruta!

La vida que tienes es solo una, y toda para ti.